Miles de cursos online pueden ser encontrados en internet para capacitarse en cualquier área, y cuando decimos cualquier área no se descarta ningún sector, puesto que hay personas que gracias a la formación online han logrado emplearse como reposteros, chef, informáticos y diseñadores de modas.
Grandes son los logros de esta maravillosa modalidad, sin embargo, el éxito de un curso no está totalmente garantizado. Muchos de estos fracasan y terminan por no cumplir con las expectativas de los usuarios.
En el caso de los cursos para aprender idiomas, la insatisfacción de los estudiantes es muy común; principalmente porque esperan lograr el ansiado calificativo “bilingüe” para optar a grandes oportunidades laborales.
No obstante, no todo es blanco y negro, puesto que el éxito de un curso depende de varios aspectos de los que hablaremos a continuación.
¿Por qué fracasan los cursos de idiomas online?
Hay muchos motivos que hacen que los cursos sean un éxito y muchas veces puede ser el contenido, el carisma del instructor o simplemente la disciplina de los estudiantes.
Profesora de cursos online
Fuente: Pexels
También hay razones por las cuales ocurre todo lo contrario y hay un fracaso inminente.
Si eres creador de contenido, te dedicas a vender tus cursos o eres un estudiante autodidacta consumado; acá las razones por las que un curso puede no prosperar y terminar siendo un rotundo fracaso.
Profesores
La modalidad online resulta muy práctica por las herramientas empleadas, no obstante, el gran problema es que los cursos se limitan al material subido a la red; fuera de la pantalla el facilitador no estará disponible para atender dudas particulares.
Como consecuencia los estudiantes se ven obligados a buscar la asistencia de terceros, bien sea de forma gratuita o paga.
Afortunadamente existen grandes comunidades de estudio que solventan interrogantes amablemente.
Cursos con interfaz complicada
El diseño de una página lo es todo para atraer a los usuarios, puesto que una web organizada se asocia con calidad y seriedad.
Los colores, disposición de secciones o la rapidez de carga de las plataformas son un punto muy importante para saber si los cursos serán lo suficientemente atractivos o no para los estudiantes.
Detalles como enlaces rotos, carga lenta, problemas de seguridad y elementos de mal gusto suelen ser un motivo de sobra para el fracaso de un aula virtual
No ser multiplataforma
Generalmente los cursos son vistos desde computadoras de mesa o laptops ¿Pero qué pasa cuando hay quienes usan otros dispositivos?
En los últimos años se ha vuelto muy común el uso de móviles para navegar en internet, por lo que por cuestiones de comodidad y hasta tiempo, suelen ser usados para no solo temas personales sino también educativos.
Miles de personas deciden educarse en momentos de descanso de sus trabajos, mientras van en el metro rumbo a su casa, trabajo, o esperan por ser atendidos en un consultorio.
Como consecuencia, una plataforma que ofrezca cursos y no sea multiplataforma está destinada al fracaso.
Herramientas poco ortodoxas
Una de las ventajas de la enseñanza en línea, es que permite utilizar herramientas que generalmente no están a disposición de la educación tradicional.
El no aprovechamiento de estas herramientas interactivas en la enseñanza online es un grave error, puesto que termina por hacer del curso algo aburrido y poco didáctico.
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